La escuela

 

Escuela de Baile Flamenco Manuela Fernández: tradición, pasión y arte en Carmona

En el corazón de Carmona, donde el flamenco se siente en cada rincón y la tradición se respira en sus calles, nació la Escuela de Baile Flamenco Manuela Fernández, un espacio dedicado a la enseñanza, difusión y disfrute de este arte universal.

Desde sus inicios, esta escuela ha sido un referente en nuestro pueblo, transmitiendo la esencia del flamenco a través del compás, la técnica y la emoción. Con un método de enseñanza que equilibra la tradición y la evolución del baile flamenco, nuestra academia se ha convertido en un lugar de encuentro para quienes sienten el flamenco como una forma de vida.

Los inicios de un sueño flamenco

La historia de nuestra escuela comienza con Manuela Fernández, bailaora y maestra apasionada, cuya trayectoria y amor por el flamenco la llevaron a fundar este espacio con un propósito claro: formar a nuevas generaciones de artistas y transmitir la cultura flamenca en su estado más puro.

Desde muy pequeña, Manuela sintió que su destino estaba ligado al baile. Su formación con grandes maestros, su entrega en cada escenario y su capacidad para enseñar hicieron que, con el tiempo, decidiera crear una escuela en su propia tierra, Carmona, cuna de grandes talentos y con una historia flamenca que merece ser preservada y celebrada.

Así nació la Escuela de Baile Flamenco Manuela Fernández, un lugar donde se aprende técnica, ritmo y expresión, pero, sobre todo, donde se vive el flamenco con el alma.

Nuestra filosofía: flamenco para todos

Desde el primer día, nuestra academia ha mantenido una filosofía clara: el flamenco es para todos. No importa la edad, la experiencia o el nivel de cada alumno; lo que realmente cuenta es la pasión y el deseo de aprender.

Por eso, en nuestra escuela ofrecemos:

Clases para todos los niveles: Desde principiantes que quieren dar sus primeros pasos en el flamenco hasta alumnos avanzados que buscan perfeccionar su técnica.

Formación en distintas disciplinas flamencas: Técnica de zapateado, braceo, giros, coreografías, interpretación y mucho más.

Espacio de aprendizaje y convivencia: Aquí no solo se aprende a bailar, sino que se vive el flamenco en un ambiente familiar, de respeto y de crecimiento personal.

Eventos y actuaciones: Participamos en espectáculos, festivales y encuentros flamencos como SIMOF Baila, EME y otros eventos culturales en Carmona y Andalucía.

Más que una escuela, una familia flamenca

Uno de los valores más importantes de nuestra academia es el sentido de comunidad. Aquí, cada alumna y alumno forma parte de una gran familia flamenca donde la confianza, el apoyo mutuo y la pasión por el arte son el motor que nos impulsa.

A lo largo de los años, hemos visto crecer a nuestras alumnas en cuanto a formación técnica, pero también hemos compartido momentos inolvidables con personas que, sin querer dedicarse profesionalmente al baile, encuentran en nuestras clases un espacio para expresarse, liberar emociones y conectar con la esencia del flamenco.

Carmona, nuestra inspiración

Ubicada en una de las ciudades más bellas y con más historia de Andalucía, nuestra escuela tiene el privilegio de estar en Carmona, un enclave con una tradición flamenca que nos inspira cada día.

Carmona no solo es conocida por su impresionante patrimonio, sino también por su riqueza cultural y artística. Aquí, el flamenco es parte de la identidad del pueblo, y nuestra escuela se enorgullece de ser un motor para mantener viva esta tradición.

El futuro del flamenco se baila aquí

La Escuela de Baile Flamenco Manuela Fernández sigue creciendo, evolucionando y adaptándose a los nuevos tiempos sin perder la esencia del flamenco puro. Nuestro compromiso es seguir formando a nuevas generaciones, seguir participando en los mejores eventos y seguir haciendo de este arte una pasión compartida.

Si sientes que el flamenco te llama, te invitamos a formar parte de nuestra familia. Ven a conocernos, prueba una clase y descubre todo lo que el flamenco puede ofrecerte. Porque el flamenco no solo se aprende, se vive.